|
TEATRO EN BUENOS AIRES
SU PASO POR EL SAN MARTINUn nuevo encuentro entre Politti y Pedro Escudero selló el ingreso del actor al elenco estable del teatro San Martin. Durante seis años, Politti participó en doce obras que no solamente le valieron el reconocimiento de crítica y público, sino que también lo afianzaron en una experiencia vital para su profesión. De Shakesperare a Shakespeare - Entre "Coriolano" y "Macbeth" trabajó en "La novia de los forasteros", "El juez de los divorcios", "La cabeza del dragón", "Adriano VII", "Rosencratz y Guildestern han muerto", "Romance de lobos", "Cremona", "Yvonne, Princesa de Borgoña", "El círculo de tiza caucasiano" y "Antígona Vélez".
Tomado de "Luis
Politti: cadencias y otros cielos", |
|
Inicio |
Biografía |
Formación artística |
Teatro en Mendoza |
Televisión en Mendoza
|
Politti
asumió que había cubierto todas las expectativas profesionales en su
provincia, y deseaba intentar un mayor crecimiento en Buenos Aires. La
decisión pudo más que el miedo a la gran ciudad y a la precariedad
económica, y buscó la manera de cumplir lo que se había propuesto. "De
pronto, empecé a sentir que quería conectarme con otro tipo de experiencia.
Sentía como una angustia, como si lo aprendido con la Tomalcheva y lo hecho
en Mendoza fueran cosas diferentes. Quería una apertura mental… Lo venía
pensando pero faltaba una oportunidad. Y un día llegó a través de un
concurso del Fondo Nacional de las Artes para actores del interior. El
ganador se hacía acreedor a una beca de seis meses para perfeccionar
conocimientos con maestros como Oscar Fessler y Antonio Cunill Cabanellas.
Gané la beca y en 1966 me vine en forma definitiva pese a que la beca sólo
alcanzaba para pagar el hotel. Pero ya estaba decidido. No venía a Buenos
Aires por la fama, sino buscando las posibilidades que en Mendoza tenían un
límite. Cuando terminó la beca empezó la lucha porque pasados los seis meses
había que meter la mano en el bolsillo. Volví a conectarme con la gente que
había conocido en los viajes anteriores -en especial con Pedro Escudero- y
el me confió un papel en "El vicario", aquella obra que produjo Osvaldo
Terranova que tuvo tantos problemas con la censura. Tres meses de ensayos, y
apenas se pudo dar una semana en Buenos Aires, otra semana en La Plata y
otra en Córdoba".